sábado, 30 de marzo de 2013

Magic: The Gathering

Me gustaría hablaros de esa clase de juegos maravillosos de nuestra infancia que atesoran multitud de grandes recuerdos y que provocan oleadas de nostalgia cuando los recordamos, en mi caso, me refiero a Magic: The Gathering, un juego de cartas coleccionables diseñado en 1993 por Richard Garfield, profesor de matemáticas, y comercializado por la empresa Wizards of the Coast.


Para quien no lo conozca, en las partidas se necesita un mínimo de dos jugadores, y los participantes adoptan el papel de poderosos magos (planeswalkers) que invocan todo tipo de criaturas, encantamientos, conjuros, instantáneos o artefactos a través de manás (o tierras) con el objetivo de conseguir que el contador de vidas de todos sus rivales quede a 0 (se empieza con 20 vidas)..


Los mazos se agrupaban por colores, cada uno de ellos se caracterizaba por unas características particulares que podía ser tu mayor fuerza o tu peor debilidad según la habilidad del jugador.
Estaba el color azul (isla), lleno de contra hechizos para frustrar al rival mientras criaturas voladoras e imbloqueables le destrozaban.
El color blanco (llanura), con el que podías desesperar a tu rival sumándote vidas y más vidas.
El color negro (pantano), con cartas que no paraban de destruir a las criaturas enemigas y de descartar cartas a tu rival.
El color rojo (fuego), basado en criaturas débiles pero rápidas, que se reproducen mientras multitud de instantáneos drenan la vida del rival.
Y finalmente, el color verde (bosque), pocas estrategias valen con este color, lleno de criaturas lentas y pesadas pero brutales, combinadas con encantamientos que aumentan aún más la fuerza de estos bichos titánicos.

Iconos representativos de los cinco colores
Rápidamente, este juego se extendió por América primero, y por el resto del mundo después. Su primer campeonato del mundo se celebró en 1994, y desde entonces se ha organizado periódicamente por todos los países y continentes, en los cuales nombres míticos para los aficionados a las Magic como Jon Finkel o Kai Budde escribieron su nombre.

Los dos mejores de la historia de Magic
Alrededor de este juego se desarrolló un micro-mercado, en la que algunas de las primeras cartas, más útiles, más míticas o más hermosas alcanzaban precios exorbitantes

El Black Lotus, la primera Magic de la historia, la carta más ansiada por los coleccionista, la más mítica, puede llegar a alcanzar los 2500 €
Mi experiencia personal con Magic se remonta al año 2001, hace ya doce largos años.
Cuando yo tenía 6, mi hermano mayor, otros cuantos amigos del barrio y yo, solíamos salir juntos por la zona donde vivíamos, cierto día, pudimos presenciar un extraño juego de cartas entre dos de mis amigos, nunca habíamos oído hablar de ello, pero no os imagináis lo rápido que hizo furor.
Mi primer mazo fue ''Golpe Celeste'', de Octava edición, aunque yo ya llevaba un tiempo jugando.
Mi primer mazo, el original, está un poco machacado pero para mí, es una reliquia
Prácticamente todo mi barrio acabó jugando a Magic en los siguientes 3 o 4 años, aun recuerdo esos tiempos con inmenso cariño, la camaradería, la confianza, las risas, la diversión, la magia, que rodeaba a esas partidas. Ninguno de nosotros compitió nunca en un torneo, jugábamos en modo libre, sin restricciones, por el puro placer de jugar, que buenos tiempos.


Pero no podía durar, todos fuimos creciendo, y se puso de manifiesto la elevada diferencia de edad que había entre unos miembros del grupo y otros, y nos fragmentamos, los más mayores dejaron casi inmediatamente las Magic, otros cuantos de nuestros amigos dejaron el grupo para salir de forma ordinaria con otras personas, no quedamos muchos.



Hace dos veranos, solo seguíamos jugando tres, contándome a mi, las partidas entonces no tenían mucha emoción, y no teníamos la oportunidad de ir a jugar a alguna tienda porque la única que existía había cerrado años antes. 
Y bueno, el resto os lo podéis imaginar, ya es historia, la edad de oro de las Magic a terminado, por mucho que lo neguemos. Tengo la sensación de que los chicos de 12 años no saben lo que es Magic, y que la poca gente que aún ama este juego está dispersa.


Sé que lo fácil sería abandonar, dejar las Magic como ese delicioso juego de mi infancia, pero no puedo evitarlo, para mi es mucho más, es una fuente inagotable de recuerdos, un último nexo con una época que no quiero olvidar, y aún hoy en día, me gusta jugar de vez en cuando, aunque no sea con la gente de siempre ni de la manera habitual.

Esta entrada es una oda al recuerdo, a la nostalgia y a los viejos tiempos.
Namárië

2 comentarios:

  1. Pues, que quieres que te diga, la comunidad de magic, en general, es bastante fuerte, tanto o más que la de jugadores de wargames.

    Algunos, a pesar de nuestra edad, seguimos coleccionando y jugando. Está bastante lejos de ser un juego "acabado". Quizá en tu entorno se dejó de jugar, pero créeme, tiene un montón de seguidores actualmente.

    Desde luego, magic tiene un fuerte componente de nostalgia. Pero aún hoy en día sigue reinventándose, y atrayendo a nuevos jugadores.

    Saludos.

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    1. No eres el primero que me lo dice, pero yo hablo de lo que veo xD.
      Vivo en una ciudad pequeña, y aquí sólo las modas más fuertes llegan a calar verdaderamente, y sé que hace unos años todo el mundo estaba con las Magic, y ahora no veo a nadie. Aquí nunca hubo un lugar para que nos reuniéramos los jugadores, no había tiendas con mesas para jugar, así que nunca fuimos demasiados, pero aún así siempre eramos unos pocos para jugar en el barrio en cualquier portal, cosa que ya no hacemos.

      Pero si de verdad sigue atrayendo a gente nueva, es una gran noticia, es esa clase de juegos que no deberían pasar de moda, y que hacen mucho bien.

      Aún juego de vez en cuando, y la verdad, no creo que sea cosa de edades.
      Un saludo y gracias por comentar ;)

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