Ya te extraño, ya echo de menos las tardes de domingo en el campo, ya echo de menos la calidez y la complicidad, ya echo de menos a mi mejor amigo, al que sólo podía ver en el campo, ya lo echo de menos.
No gastaré lineas en echar culpas a alguien a quien todos conocemos, no tiene sentido, lo realmente importante es que mi equipo, ya no está, que La Balastera se ha quedado huérfana, que la afición ha perdido su corazón, que todos notamos un vacía en el pecho.
Muchos lamentarán no haber estado ahí cuando se les necesitó, pero los que hicimos todo lo posible por que ésto no acabara no debemos reprocharnos nada, nosotros estuvimos allí, estuvimos cuando nadie más estaba, que eso reconforte nuestros corazones.
Se va un equipo, una afición, un sentimiento, una alegría,... mi ciudad pierde algo bueno.
Mi sangre seguirá siendo morada, gracias por esos grandes momentos, gracias por permitirme reencontrarme con mis mejores amigos, gracias por los grandes recuerdos que conservaré eternamente. HOY, Y SIEMPRE, ALÉ PALENCIA, ALÉ MI PALENCIA!
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